jueves, 29 de octubre de 2015
consecuencias psicológicas de un terremoto
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CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS DE UN TERREMOTO
El terremoto recientemente registrado en el norte y centro de nuestro país, y por
cierto sus respectivas réplicas, están generando gran inquietud en personas de
todas las edades. Al respecto, entre los principales trastornos a nivel psicológico
que se pueden relacionar con los sismos, están:
• Trastorno adaptativo.
• Estrés postraumático (TEPT).
• Pesadillas.
• Trastorno de ansiedad.
• Crisis de pánico.
• Depresión.
• Estado disociativo.
• Alcoholismo.
• Drogodependencia.
Es importante aclarar que el miedo, la
inquietud y la ansiedad frente a las réplicas
son normales, ya que estas reacciones
predisponen al sujeto a la acción positiva
(mecanismo de defensa ante daños
potenciales).
Los problemas surgen cuando estos
síntomas pasan a generar un malestar tan
grande que llevan a la persona a dejar de
lado el trabajo y su vida social o personal,
dominados por el miedo.
Frente a esto, si los síntomas duran más de
un mes de manera intensa, sin que haya una
nueva exposición a réplicas, es altamente
recomendable consultar con un especialista.
En este contexto, estar permanentemente expuestos a réplicas puede intensificar
ciertos “síntomas psicológicos” frente al temor que se repita un evento de mayor
magnitud (Richter) o intensidad (Mercalli). A lo anterior, se debe sumar que la
población está siendo bombardeada por los diversos medios de comunicación y
redes sociales -no siempre con criterio- de que podría ocurrir un terremoto aún
peor, generando mayor angustia a la ya existente.
Controle las noticias y programas que observa
su familia en la TV
• Descompensación en personas con
trastornos psiquiátricos previos.
• Suicidio (casos más extremos).
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CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS DE UN TERREMOTO
Entre las recomendaciones que se entregan para manejar los efectos psicológicos
de esta emergencia de origen natural, está la de asumir que “Chile es y seguirá
siendo un país sísmico”.
Por lo general, la angustia nos consume no porque la tierra se mueva, sino por el
miedo de que algo malo le pueda pasar a nuestros seres queridos. En ese
escenario, hay que tomar precauciones y tener claro cómo debemos actuar
individualmente y como grupo familiar o laboral al momento de un sismo mayor.
RECOMENDACIONES
Contar con un plan de emergencias y evacuación actualizado: que incluya
distintas situaciones, en atención al lugar geográfico en el que se encuentra
(terremoto, tsunami, incendio, erupción volcánica, aluvión, otras).
Comer adecuadamente, ya que en ocasiones, la ansiedad se manifiesta a través
de problemas estomacales.
Buscar distracción para disminuir el nivel de ansiedad. Lo puede lograr
conversando temas triviales, escuchando música o mirando algún programa
entretenido en la TV.
Relatar la experiencia y/o ensayar cómo explicar a los niños lo que está pasando,
sin traspasarles el miedo. Con ello, podemos evitar que los menores registren el
evento como algo traumático.
Descansar apropiadamente debido a que la alerta permanente puede llevarnos a
una sobre-exigencia y colapso nervioso.
Realizar el ejercicio de respirar profundo. Se ha podido documentar que respirar
profundo durante una situación estresante ayuda en tres aspectos: 1) mayor
oxigenación del cerebro 2) relajación muscular y 3) disminución del dolor.
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Evitar pensar en lo que “pudo haber ocurrido”, esto pasa a ser un factor
estresante que no favorece a la persona ni a quienes le rodean.
Tener un adecuado manejo de la exposición a las noticias. El trabajo periodístico
puede resultar favorable para tranquilizar y/o movilizar la ayuda, asimilar lo
ocurrido y generar conciencia social; sin embargo, hay personas que al escuchar
la prensa les vuelve la angustia y se exponen innecesariamente a un retroceso
anímico.
Consultar con un especialista en caso de que la sintomatología se mantenga con
intensidad por más de un mes posterior al terremoto. Es importante el
seguimiento durante los 6 primeros meses, ya que los síntomas de estrés
postraumático (TEPT) puede aparecer de manera desfasada.
¿CÓMO NOS AFECTAN LOS TEMBLORES NOCTURNOS?
De acuerdo a Carolina Aguirre Mardones, neuróloga del Centro del Sueño de la Red
de Salud UC, los resultados varían de acuerdo a la edad: los niños que duermen
mal tienen más repercusiones al día siguiente; los adultos por lo general son
capaces de continuar con sus labores, y los adultos mayores están más adaptados a
desvelarse porque no tienen que trabajar.
Los efectos psicológicos post terremoto se acentúan si estamos pasando por una
mala etapa anímica, y en ese caso, la ansiedad nos afecta mucho más, asegura la
especialista.
RECOMENDACIONES
CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS DE UN TERREMOTO
• No caer en la psicosis colectiva de
las redes sociales.
• Mantener una rutina normal
durante el día y posterior a la
réplica.
• Durante la noche, en ningún caso
encender la TV, la luz o revisar el
celular.
• Bajar el perfil a la situación.
• Optemos por no dormir siesta, y si
es así, no más de media hora.
• En relación a las siestas: “Nunca
después de las 17 horas, porque nos
quita la necesidad de dormir en la
noche. Tampoco se debe dormir
luego de llegar del trabajo, y hay
que preferir los buenos hábitos antes
de dormir, como desconectarse
temprano, comer liviano, apagar la
TV y olvidar el celular”, agrega la
neuróloga consultada.
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CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS DE UN TERREMOTO
De acuerdo a la Fundación San Carlos de
Maipo, suele pasarse por alto la salud
mental de los niños afectados por desastres
naturales, los cuales podrían desarrollar
cuadros de angustia o patologías más
severas, que incluso pueden llegar a
afectarles en su desarrollo futuro.
Según el protocolo diseñado el año pasado
por dicha fundación y otras entidades,
después de vivir una situación de crisis,
como un desastre natural, los niños y niñas
pueden presentar alguno de estos síntomas:
CÓMO SABER SI NUESTROS NIÑOS/A SUFREN UNA CRISIS POST TERREMOTO
Recuerdos
frecuentes de
la emergencia
Dolores de estómago
u otras dolencias sin
sentido
Pasividad y
miedos
Irritabilidad,
agresividad o
retraimiento
Pesadillas o
dificultad para
dormir
Llanto sin
motivo
aparente
Problemas de
concentración
Apego
excesivo a los
adultos
Sobresaltos
Sentimientos
de culpa
Conductas
regresivas, como
chuparse el dedo,
orinarse o hablar
como guagua
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CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS DE UN TERREMOTO
¿QUÉ HACER EN CASO DE QUE UN NIÑO/A
PRESENTE ALGUNO DE ESTOS SÍNTOMAS?
Hacer que el niño/a se sienta
comprendido.
Transmitirle la necesidad de aceptar lo
ocurrido, pues ya no se puede cambiar.
Crear una atmósfera cálida y amigable.
Ser atento, honesto y transparente.
Ser realista y objetivo.
Si el comportamiento es inusual y se
prolonga durante más de 6 semanas, se
debe buscar apoyo profesional indica La
Fundación.
Salomón Leal Muñoz
Representante Consejo Administrativo Bienestar
Representante Comité de Factores Psicosociales Nivel Central
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Nota: Un afectuoso saludo para mis colegas de la Región de Coquimbo, muy en especial,
para quienes trabajan en Illapel.
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