lunes, 4 de diciembre de 2017
críticas al sistema de notas en la educación
Ya estamos en diciembre y es cuando las notas valen prácticamente la vida. Pasas de curso y si es con buenas notas te premiarán y estarás casi en la gloria, o bien repetirás y tu vida puede transformarse casi en un infierno, probablemente tendrás el reproche de todos.
Por mi parte, cuando estuve en el colegio tuve buenas notas, en algunos años optuve los primeros lugares, sobre todo cuando salí de la enseñanza media en que optuve el primer lugar de todos los cuartos medios. En la universidad estuve aí no más, como uno del montón, incluso me heché 2 ramos, uno lo hice en un semestre y el otro era anual.
Pero al marjen de todo esto, la nota parece ser como una llave, ya que te puede abrir posibilidades, sobre todo de becas y de postular a buenos colegios o a instituciones de educación superior de prestigio. Pero también la nota puede ser como un paredón, puede condenarte a castigos, repetir de nuevo el curso, ser objeto de burlas y reproches por familiares y amigos.
Se supone que la nota es una forma de medir el conocimiento,, medir cuanto aprendiste respecto de una determinada materia, medir ciertos logros u objetivos cumplidos. Desde este punto de vista el sistema de nota es bueno, ya que permite medir, y no es blanco o negro, sino que tiene ciertos matices, así las cosas, la nota es una buena forma de medición. Sin embargo, el sistema de notas se ha dejenerado y es una forma que puede servir tanto para el chantaje, la sumisión y represión de las personas, ya que por las notas una persona puede ser premiado o castigado. Se asume que si una persona optiene una buena nota es porque se esforzó y se debe premiar. Por el contrario, si una persona optiene una mala nota se asume que es un flojo, por tanto se debe castigar o reprender.
Quizás para muchos sea correcto y justo premiar el esfuerzo y condenar o castigar la flojera, ya que nuestra sociedad funciona de esa forma. Sin ir más lejos, las religiones te premian con el cielo si te portas bien, y te castigan con el infierno si te portas mal. El problema radica cuando los medios se transforman en fines. Todos nos preocupamos de las notas, sin embargo, nadie se preocupa realmente si se aprendió o no, si se logró el objetivo o no, pareciera ser que la nota es el objetivo en si mismo y no lo que la nota pueda representar.
A los padres prácticamente poco les interesa cuanto aprendieron o no, sólo les interesa las notas ya sea para premiar o castigar, pues la pregunta siempre es: qué nota te sacaste??, y no cuánto aprendiste??
Ahora con mayor razón, ya que ambos padres trabajan,llegan cansados a sus hogares y muchas veces apenas les ayudan a hacer las tareas a los hijos.
Quizás si la medición del conocimiento estuviese basada en logros o cumplir siertas metas u objetivos, no se daría tanta importancia a las notas. Creo que en algunos países hay sistemas educativos que no se basan en las notas, me parece que son en los países bajos, desconozco en qué se basan, pero probablemente se base en cumplimiento de objetivos.
Por otra parte, durante la vida, tú tienes que cumplir siertos logros y objetivos, si no los cumples te puede ir más o menos mal, sin embargo, en pocas actividades se evalúan con notas. Nosotros como funcionarios públicos nos evalúan con notas y tenemos una hoja de vida, parecido como en el colegio. Pero en el mundo privado, te piden objetivos y no se evalúan con notas.
Con un sistema así, se evitarían que las notas se usaran como forma de chantaje y para reprimir, la gente se preocuparía en lograr sus objetivos y no por alcanzar un número que parece ser como la llave para todo.
Ahora que estamos a fin de año, no os preocupéis, aunque no hayais aprendido nada pero si tienes buenas notas, lo pasarás bien, pasarás de curso y puedas lograr incluso alguna beca.
Si por el contrario, no pasaste de curso por las notas, tendrás que repetir todo el próximo año, y si diste una prueba o examen para salvarte, aunque no hayas aprendido nada, tendrás un buen pasar en estas vacaciones.
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